Entrevista realizada al artista
Eduardo Filún
Cuéntanos cuál es tu motivación para trabajar la temática.
Ha sido un desafío trabajar a partir de un eje temático vinculado al concepto de infancia, ya que se aleja de la línea de trabajo, que como artista visual he ido desarrollando durante los últimos años. En ese sentido, pienso, que en aquel distanciamiento reside el impulso creativo desde donde he comenzado a vincularme con el tema propuesto para la realización de la exposición colectiva.
¿Qué es lo que buscas expresar a través de tu obra?
Me propuse vincularme con el concepto de infancia, desde una perspectiva crítica acerca del contexto actual. Desde allí comenzaron a surgir diferentes problemáticas relacionadas con el juego y el derecho a la educación enfocada en los primeros años de escolaridad, las que fueron encauzándose en una visión general respecto de lo que puede llegar a ser el hecho de “crecer en Chile”. Por medio de la propuesta visual conformada por un “Crucigrama” compuesto por una serie de imágenes, letras y palabras que devienen de la problematización acerca de las ideas ya mencionadas, se pretende generar una relación con el/la espectador/a a partir de las características deductivas propias de los crucigramas, develando así –el/la espectador/a- las ideas significantes principales de las estructuras verticales y horizontales que articulan la pieza.
¿Existen referentes teóricos o visuales en los que te has basado? ¿Hay algo en particular que te inspire para la realización de esta obra?
Principalmente tomé referencias gráficas y estéticas relacionadas con diferentes juegos “infantiles” ligados al aprendizaje y pensamiento de la palabra escrita, tales como sopas de letras y crucigramas. Por otra parte, la revisión del “Silabario Hispanoamericano” me permitió establecer ideas más claras en torno a la propuesta visual presentada para la exposición.
Respecto al proceso creativo ¿hay algún aspecto relevante que quieras mencionar, como elección de la materialidad, experimentación y/o lenguaje?
En cuanto al proceso creativo ha sido interesante trabajar con técnicas gráficas derivadas del grabado, específicamente la monotipia con tinta negra, debido a las características que esta presenta, siendo ésta, una técnica rápida para la producción de imágenes de características irrepetibles, así como también la gestualidad sutil y/o violenta que se pronuncia en cada impronta.