Belén Alejandra Cayupi Lefiman, nació el primero de abril de 1999, actualmente estudiante de Licenciatura en Artes Visuales.
Paisaje. Óleo sobre lienzo, 50x40 cm, 2018.
Los temas que recorre son relacionado a un pasado encontrado, a la muerte y por sobre todo al deterioro; también a esto se le incluye la exploración de materiales transparentes, vinculándolo a lo delicado y a la presencia de lo que no se ve.
"En el diorama, la vegetación se presenta transparente, quedando ajeno a lo que se quiere intensificar, que sería los postes de cables y el esqueleto de una casa. Se eligió el diorama por ser una técnica que presenta un escenario que da la posibilidad de ser observado por diferentes ángulos. En la obra se muestra un paisaje, disponiendo elementos que le llamaron la atención a la artista, siendo un resumen de lo que más le gusto del paisaje de la carretera, donde se ve el abandono de objetos cotidianos que alguna vez tuvieron un gran uso para la comodidad de las personas."
Diorama
2020
Hilo de pescar, alambres de diferentes grosores y palos para maqueta.
Para ello se enfrenta con las técnicas del bordado y el acrílico, técnicas que han estado presentes en gran parte de su vida y en la formación en pos de convertirse en una artista.
"La tela de tul blanca, una tela transparente, una transparencia que se relaciona con lo delicado y lo frágil. Se borda con alambre dorado un dibujo de los signos vitales conectados con polillas negras, el alambre presenta una degradación de colores, se inicia con el dorado para luego continuar con el café y terminar con el negro. También se encuentra la pintura de una mano abierta que salen de ella unas polillas negras. Las polillas como representación del deterioro, absorben la vida del ser humano, mostrando que el deterioro siempre ha estado ahí."
Bordado, tela de tul y visillo, alambre dorado y acrílico
20x20 cm
2019.
Sin descripción. Participo 2017: fue integrante en la realización de un mural para la Teletón, en el proyecto por la inclusión “El viaje de mis sueños”, que se encuentra en el Museo Nacional Ferroviario Pablo Neruda de Temuco.
2018: participación en la exposición colectiva “Desde el bosque”.
2019: participación en la exposición colectiva “Desobediencia Colectiva”.
"Pintura de un retrato sonriendo, en el cual se omiten los ojos, con la intención que esa omisión se convirtiera en una máscara. Una máscara que se está destrozando de a poco, revelando que detrás de ella no hay nada.
Esta obra es parte de una serie de tres retratos que representan la fragilidad del ¿quién soy?"
Acrílico sobre muselina
21,5cm x 27,5 cm
2019.